Presentada por su hermano Craig Robinson, Michelle Obama salió al podio de la Convención Nacional Demócrata anoche para cumplir con su parte: presentar la emotiva y emocionante historia de los Obama; hacer de una biografía improbable una pantalla con la que se puedan relacionar los votantes que hay que conquistar, los trabajadores -blancos y negros, conservadores y liberales- que están sufriendo con la crisis económicas y que quieren creer que trabajando duro pueden darle una buena educación a sus hijos y permitrles superar la pobreza.
Valores familiares, orígenes humildes, superación de la pobreza.
Si la estaban viendo, quizás puedan haber pensado en votar por Obama. La gran pregunta es si los no-Demócratas ven o no la convención.
2 comentarios:
Hola Francisco,
Ayer te escuché en la Zero hablando del tema y decidí googlearte para ver si aparecía tu blog, y voila, aca estoy.
Sobre este punto, tu "gran pregunta", creo que el tema es saber si alguien realmente ve estos verdaderos espectáculos "made for TV", pues de acuerdo a lo que lei hoy en Ciudadanos & Consumidores en una entrevista al productor ejecutivo de la DNCC, los televidentes han disminuido considerablemente en cada una de las convenciones (15.5 millones vs. 27 millones que ven American Idol todas las semanas), siendo fieles sólo los llamados "political junkies".
En fin. Creo que ciertamente es un punto valido para poder discutirlo y tener en consideración para ver si los discursos persuaden a más de algún indeciso.
Saludos!
J.A.
Hola Juan Andrés, gracias por el comentario.
Efectivamente, estos shows suelen ser sólo "predicar para los convertidos", pero también es cierto que proveen imágenes, clips que son repetidos en el loop de 24/7 de los canales de cable y que son usados en los avisos televisivos. Dan material, finalmente.
Y en eso, en una de esas, puede que tengan algún impacto en los indecisos activos: esos que están esperando que una de las campañas los seduzcan.
Nada como el experimento que hace CNN en todo caso: juntan a un grupo de indecisos y los graban mientras ven la convención (lo han hecho antes con debates) y luego les preguntan sus impresiones. Puro show, porque no parecen precisamente una muestra estadística seria. Pero igual es un intento.
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